TRABAJO EN EQUIPO: LA RECETA PARA EDUCAR EN PANDEMIA
La posible pérdida del año escolar se presentaba como uno de los fantasmas más temidos por las familias. En un ciclo lectivo signado por la falta de presencialidad en las aulas, el trabajo en equipo entre familia y colegio se transformó en una herramienta vital para llevar adelante el proyecto pedagógico de Apdes, sin perder calidad educativa y respetando los procesos emocionales y los contextos particulares de alumnos, padres y también docentes.
Trabajo en equipo
“Llegar juntos es el principio. Mantenerse juntos, es el progreso. Trabajar juntos es el éxito”, Henry Ford.
Hoy, con los resultados obtenidos en las pruebas de calidad Apdes, sabemos que hemos logrado transitar de manera exitosa un recorrido que se presentaba incierto, lleno de desafíos y complejidades. Esa frase que está en nuestro ADN como institución y que tanto hemos dicho a lo largo de nuestra trayectoria: "Familia y Colegio trabajando juntos", cobra especial relevancia.
Cada unos de los actores del proceso educativo: familias, alumnos, maestros, profesores, directivos y administrativos, ha hecho un denodado esfuerzo y ha mostrado un enorme y encomiable compromiso para alcanzar las metas propuestas en marzo, cuando todavía la pandemia no había llegado con todo su rigor.
El aporte de todos, el trabajo en equipo, ha sido la clave para un ciclo lectivo con mucho aprendizaje y tanto para agradecer.
Los equipos docentes:
- Fuerte compromiso con la tarea, para seguir cumpliendo el rol con la misma integridad y eficiencia en circunstancias adversas.
- Capacidad de adaptación de cara a los nuevos desafíos, para desarrollar estrategias que permitieron seguir llevando adelante la labor docente y directiva sin menoscabar la calidad que caracteriza nuestro proyecto educativo.
- Empatía, para mantenerse cercano a pesar de la distancia física y atento a las distintas realidades que atraviesan nuestros alumnos y sus familias para consolidar el trabajo en equipo.
- Formación permanente y continua en uso de nuevas tecnologías y en nuevas metodologías pedagógicas que reclama esta nueva realidad.
Los alumnos:
- Compromiso con su propio aprendizaje. Verdaderos protagonistas que supieron sacar provecho a estas circunstancias tan especiales para crecer académica y humanamente.
- Predisposición para asistir a clases, en condiciones adversas, en espacios alternativos y atravesados por la vulnerabilidad del aislamiento y una dinámica familiar en constante redefinición.
Los padres:
- Garantes del proceso educativo en condiciones de gran complejidad. Brindando los recursos tecnológicos para convertir cada hogar en un aula.
- Férrea disposición para el trabajo en equipo con los docentes para apoyar a sus hijos/as en las distintas instancias de su aprendizaje y en su situación emocional y vincular.
- Flexibilidad y paciencia para afrontar la difícil tarea de tener en casa la escuela, el trabajo propio y nuevas rutinas, todo de un momento a otro.
El balance 2020
Antes de cerrar un año tan diferente y desafiante, nos pareció oportuno preguntar a algunas de nuestras familias, qué rescatan como positivo en este ciclo lectivo:
Lo que la pandemia nos dejó
Entre las ganancias que nos deja esta pandemia, sin lugar a dudas está la revalorización del lugar del otro tanto en el proceso educativo como en la vida, cada uno complementando y apoyando el rol del otro. Lo hemos escuchado incluso en palabras del Papa Francisco: "Nadie se salva solo".
Este confinamiento nos ha hecho comprender cabalmente los esfuerzos y los medios que cada uno plasma para que la educación se concrete y la importancia capital del trabajo en equipo.
Algunas ventajas de trabajar en equipo
- Fomenta y desarrolla la creatividad
- Incrementa la motivación
- Mejora la competencia comunicativa
- Aumenta la eficiencia
- Genera mayor sentido de pertenencia
- Refuerza la coordinación
- Favorece la complementariedad
- Incentiva el compromiso
- Optimiza el tiempo